Ambos vienen de la misma planta Camelia Sinensis de donde obtenemos los brotes para elaborar nuestro Matcha, pero tienen procesos diferentes de cultivo, preparación y consumo, el té Matcha es cubierto con lonas oscuras 20 días antes de su recolección con el fin de aumentar la concentración de clorofila, proporcionando al matcha su característico color verde vibrante, de esta forma se conservan mejor sus notas, aromas y tonos adecuados, bajo estas lonas oscuras se evita que los rayos de sol comienzan su proceso de oxidación hacia la planta.
Por el contrario del té verde que se recolecta de forma tradicional y su proceso es completamente diferente, haciéndolo más sencillo, su nombre se debe al color que adquieren sus hojas durante el proceso de fermentación y secado.
La diferencia principal de estos dos tipos de té. Es la forma como se realizan antes de llegar a cada uno de los hogares en el mundo, teniendo en cuenta que su preparación final también es diferente, el té Matcha es triturado por completo y luego molido hasta obtener un polvo fino verde, mientras el te verde común se obtiene de fragmentos secos o deshidratados de la misma planta Camellia, consumiéndose en infusión.
Se considera que los compuestos saludables se concentran mejor en el té Matcha y el cuerpo los absorbe en su totalidad.
Nuestro Matchali grado ceremonial es orgánico de origen japonés importado. Es un Superfood que nos aporta 137 veces más antioxidantes que una taza de té verde. Disfrútalo mientras obtienes todos los beneficios que nos aporta esta bebida fría, caliente, en frappes, comidas, postres y más…